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La Casa Blanca impuso el jueves restricciones de visas a los adversarios prorrusos del nuevo gobierno de Ucrania en Kiev y sentó las bases para ulteriores sanciones financieras a Moscú por negarse a retirar sus fuerzas militares de la región de Crimea en Ucrania.
Las nuevas restricciones afectan a un número no especificado de personas y entidades que, según el gobierno de Barack Obama, amenazan la soberanía y fronteras territoriales de Ucrania. Fueron anunciadas en Washington en momentos en que el secretario de estado John Kerry viajaba rumbo a una reunión con el canciller ruso Serguei Lavrov en Roma.
Las anticipadas sanciones financieras penalizarán "a aquellos que estén más directamente involucrados en desestabilizar Ucrania, incluso la intervención militar en Crimea, y no excluye medidas ulteriores si se deteriora la situación", dijo la Casa Blanca en una declaración. Funcionarios estadounidenses dijeron que podrían incluir a funcionarios y entidades del gobierno ruso, aunque es improbable que afecten directamente al presidente Vladimir Putin.
"A la vez, como ha dicho el presidente, buscamos trabajar con todas las partes para alcanzar una solución diplomática que tranquilice la situación y restablezca la soberanía ucraniana", dijo la declaración. "Exhortamos a Rusia a aprovechar la oportunidad que se le presenta para resolver esta crisis por medio de un diálogo directo e inmediato con el gobierno de Ucrania".
Las sanciones se incrementarán significativamente si Rusia presiona áreas del este de Ucrania, señalaron funcionarios de alto rango, y agregaron que actualmente no existen indicios de Moscú dará ese paso. Los funcionarios dijeron que las sanciones podrían ser disminuidas si Rusia retira sus tropas de Crimea y reconoce al gobierno nuevo de Ucrania.
Un alto funcionario del gobierno dijo que las nuevas restricciones afectan a los rusos y ucranianos en la región de Crimea. Crimea es una península donde funciona una importante base naval rusa y es histórica y culturalmente un bastión de Rusia. Habló con la condición del anonimato por hablar sobre restricciones todavía no anunciadas públicamente.
Funcionarios del gobierno local en Crimea que buscan separarse de Ucrania el jueves fijaron el 16 de marzo como fecha para un referendo acerca de si la región debería pasar a formar parte de Rusia.
La inestabilidad en Ucrania alcanzó su máximo nivel en febrero, después de meses de protestas prooccidentales contra el presidente Viktor Yanukovich debido a las penurias económicas y la corrupción. Yanukovich, que es prorruso, huyó a Rusia en busca de protección, y el presidente ruso Vladimir Putin despachó soldados a Crimea en una demostración de fuerza contra el nuevo gobierno en Kiev.
La prohibición de visas se aplicará inmediatamente y se suma a una decisión anterior del Departamento de Estado de negar la entrada a Estados Unidos de personas involucradas en abusos a los derechos humanos vinculados con la opresión política en Ucrania. Las fuentes no aclararon si Yanukovich era uno de los sancionados.
El plan de sanciones, detallado en una orden ejecutiva, sienta las bases legales para que el Departamento del Tesoro imponga penalidades financieras a los trasgresores. El objetivo consiste claramente en castigar el movimiento separatista en Crimea como la decisión de Rusia de despachar fuerzas militares allí.
Las sanciones prohíben a estadounidenses hacer negocios con los sancionados.
