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Veinte años después, Peterson es el gestor de los elefantes en el 'Hogle Zoo'. Su día comienza a las 7:30 de la mañana, lleno de funciones típicas de la gestión. Hay reuniones que atender, un montón de papeleo que llenar, empleados para supervisar, y suministros a la orden. Pero cuando tienen la tarea de cuidar a tres elefantes africanos (el mamífero más grande en la tierra) ya no está pidiendo bolígrafos y lápices. Está ordenando su alimentación, con camiones de comida.
En estado salvaje, los elefantes deambulan por 16 horas al día en busca de comida (raíces, hierbas, frutas y corteza). Un adulto puede consumir 300 libras al día. Pero los elefantes residentes de 'Hogle Zoo', Dari, Christie y Zuri, reciben alimentación de primera. Por tanto, no necesitan comer tanto para obtener sus nutrientes. La ingesta de las tres hembras hacen un total combinado de 200 libras de productos diarios, lo que resulta en proporción una producción aún más grande. Ellos excretan 600 libras cada día.
Empalar 600 libras de caca no es la mejor parte del día de un conservador de elefantes, pero es necesario. Comprobar las heces de un animal es una señal rápida en cuanto a si hay problemas de salud que deben ser atendidos y mantener los animales sanos, y felices, lo que conduce a la mejor parte de un día en los cuidadores: la interacción con los elefantes.
Peterson dice que cuando comenzó a trabajar con los elefantes se sorprendió al saber lo inteligente que eran. La investigación actual muestra que los elefantes pueden estar a la par con los delfines y simios cuando se trata de inteligencia. Utilizan herramientas, muestran afecto, lloran a sus muertos, comprenden el valor del trabajo en equipo para realizar una tarea, e incluso pueden reconocerse en un espejo.
Peterson comenta que los elefantes del zoológico son rápidos en aprender, y parecen disfrutar con el reto de la formación. Algunas cosas vienen rápidamente, otras habilidades más complejas pueden tardar varios días, tales como enseñar a Zuri cómo recoger un frasco de mantequilla de maní y colocarlo en un contenedor de reciclaje.
Toda la formación se reúne en un espectáculo de encuentro con elefantes del 'Hogle Zoo'. Peterson cree que Dari, Christie y Zuri son embajadoras de sus similares salvajes. Su esperanza es que al observar lo que hacen los elefantes del zoológico, la gente va a aprender a apreciarlos, aprender lo importante que son, y que necesitan nuestra protección.
En la década de 1970 había de uno a dos millones de elefantes en África. Hoy se cree que el número está alrededor del medio millón. Hay dos factores principales en su declive, todos por causa de los humanos, la invasión del hábitat y la demanda de marfil. Se estima que 25.000 elefantes mueren al año por sus colmillos. Según el Fondo Mundial para la Naturaleza, "Si las acciones para su conservación no son inminentes, los elefantes pueden llegar a extinguirse localmente en algunas partes de África, dentro de 50 años".
Otros estiman que podría suceder en tan sólo 15 años, y tendría un impacto devastador en el ecosistema donde viven los elefantes. Otros animales, insectos, y plantas, dependen de ellos para su supervivencia. Un elefante puede encontrar agua subterránea y sacarlo con sus colmillos, lo que proporciona agua para otros animales e incluso los seres humanos. Algunas especies de plantas dependen de los elefantes por la dispersión de sus semillas. Los elefantes comen semillas, y luego las expanden en sus excrementos. El estiércol es un gran fertilizante para que las semillas se propaguen.
Usted podría preguntarse ¿qué se puede hacer para ayudar a salvar a estas criaturas apacibles?. La respuesta fácil es no comprar productos hechos de marfil. También puede ayudar a las organizaciones dedicadas a la conservación de elefantes, o empezar por simplemente ser más conscientes de cómo las cosas que hacemos afectan al mundo que nos rodea.
¿Qué hace el zoológico con todo ese excremento? Algunos zoológicos lo reciclan en abono. El Zoo de Denver tiene un vehículo que usa el excremento como combustible. Por ahora, el Zoo Hogle de SLC lo envía fuera, a una planta que se ocupa específicamente de los excrementos de zoológicos.
CORREO ELECTRÓNICO: heather@deseretnews.com
Datos divertidos del elefante:
■ La trompa de un elefante puede pesar 400 libras y llegar hasta los 7 pies de largo.
■ La piel de un elefante es una pulgada de espesor, sin embargo, es tan sensible que puede sentir el posado de una mosca.
■ Los elefantes tienen problemas de visión, pero un increíble sentido del olfato.
■ Los elefantes pueden recoger ondas subsónicas de otros elefantes, a través de las vibraciones en el suelo.
■ Los colmillos son en realidad grandes incisivos.
■ Los elefantes son el único mamífero que no puede saltar.
Conozca a los elefantes:
El 'Zoo Hogle' de Utah es el hogar de tres hembras elefantes africanos: Dari, Christie y Zuri.
Dari
Nacida en 1961
Peso: 8,600-8,800 libras.
Dari ha estado en 'Hogle Zoo' desde 1967. Ella es la matriarca, y está muy a cargo de la manada en Hogle. Dari puede ser recelososa con los cambios y nuevas ideas, pero una vez que los acepta es una elefante muy dócil. Dari es, sin duda, la más afectuosa de las tres elefantes.
Christie
Nacida en 1986
Peso: 7,900-8,100 libras
Christie llegó al zoológico a los 2 años. Christie está en la cola de la manada; no es un mal lugar. Tiene muchas ganas de aprender cosas nuevas y es muy fácil trabajar con ella. Christie es la elefante con la que comienzan la formación las nuevas personas cuando entran en la instalación. Ella puede inquietarse fácilmente, Sobre todo porque es una madre que todavía tiene alguna cría que queda con ella. Christie ama sus golosinas, y hará cualquier cosa para que le den comida.
Zuri
Nacida: 10 de agosto 2009, en el 'Hogle Zoo', de Christie y el padre llamado Jackson (del Zoo de Pittsburgh).
Peso: 2900 libras y creciendo
Zuri se encuentra en medio de la manada, y puede salirse con casi cualquier cosa con su tía Dari. Zuri está muy ansiosa por entrenarse. Ha sido divertido verla crecer y aprender nuevos comportamientos. Le encanta jugar y ser traviesa. A ella le gusta perseguir a las aves que se posan o pasean en el patio. Zuri a veces puede mostrar su edad (4) y lanzar un ataque. Con todo, Zuri es una típica elefanta de 4 años de edad.
FUENTE: Eric Peterson, Hogle Zoo Periodista español especializado en deportes por más de 30 años. Twitter: @cartiles60
