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Doblete de Messi da primer puesto a Argentina ante Nigeria (3-2) que clasifica segundo tras derrota de Irán ante Bosnia (3-1)Argentina es Messi, y Messi es Argentina. Lo demás es acompañamiento. Al menos eso es lo que se ha podido ver en esta fase de grupos, y especialmente en este partido, donde los dos magníficos goles de Leo, más un tercero del lateral Rojo de rebote, con la rodilla, fueron los que le dieron la victoria cómoda (3-2) ante Nigeria. El conjunto africano anotó dos goles de respuesta inmediata, pero trabajó lo justo porque sabía que su clasificación no peligraba, dado que Bosnia vencía claramente a Argelia en el otro partido del Grupo F.

Argentina ha hecho pleno de tres victorias, sumando nueve puntos, algo que les iguala a Holanda y Colombia. Pero a diferencia de naranjas y cafeteros, los gauchos no han impuesto su juego, ni han sido superiores a sus rivales con claridad; al contrario, han mostrado grandes debilidades, especialmente en defensa, y una Messi-dependencia muy preocupante. Cuando “La Pulga” salió del campo, para reservarlo por primera vez, con el primer puesto conseguido, se vio a una albiceleste muy mediocre, sin juego y sin personalidad.
Lo bueno para los argentinos es que se está viendo al mejor Leo Messi, lejos del que se vio en el FC Barcelona esta temporada, donde claramente se le veía desmotivado y con su cabeza en la cita mundialista, su gran asignatura pendiente. El “enano”, como le llaman cariñosamente sus compañeros, se le ve comprometido, feliz y motivado, y además le están saliendo las cosas. Leo, que lo ha ganado todo con el Barsa, quiere conseguir un título con su selección, porque sabe que es lo que le falta para entrar en el Olimpo de los Dioses del Fútbol.
Messi, Musa, y poco más
En cuanto al partido, lo mejor fueron los goles de bella factura en ambas porterías. Nada más iniciarse el juego, en la tercera posesión albiceleste, se le pone un gran balón en profundidad a Ángel Di María que en carrera se mete en el área y dispara con pierna izquierda un tiro al palo corto, muy ajustado, que llega a tocar en su salida el portero Vincent Enyeama. Pero el balón lo superó, tocó en el palo, en la cabeza del arquero, y quedó suelto entre el área chica y el punto de penalti, donde anticipa Messi para con fuerte chut enviarlo dentro de la meta, pegando en el interior de la red alta.
Esa jugada fue en el minuto 3’, para el 1-0 de Argentina. Lo curioso es que nada más sacar de centro, los argentinos intentan sorprender de nuevo, en una contra rápida, pero las Águilas africanas le cortan la jugada e inician otra acción de rápido contragolpe, y en tres toques el balón le llega por izquierda a Ahmed Musa en el área, que tras recortar a Pablo Zabaleta, lanza un formidable disparo cruzado, con mucho efecto, que hace imposible la estirada de Sergio Romero, colocando el empate a uno en apenas cuatro minutos.
El juego desde entonces fue más bien aburrido, con acciones aisladas de ataque por parte de Di María (otro de los jugadores argentinos que han llegado más en forma a este torneo), y Musa (delantero de CSKA de Moscú, y el mejor jugador nigeriano en el Mundial). Hasta que, de nuevo, en el final del primer tiempo, vuelve a aparecer Messi. Dos faltas para frenar a “La Pulga”, muy cerca del área y en la misma ubicación, le dieron la oportunidad al astro sudamericano a ajustar su tiro y en el segundo lanzamiento lo coloca en la escuadra derecha, imposible de llegar para Enyeama que se queda mirando el golazo de Leo y que adelantaba a la albiceleste por 2-1 antes del descanso.
Curioso fue que nada más iniciar, a los dos minutos, las Águilas africanas volvieron a empatar muy pronto por medio de Musa, que también tuvo su doblete en este partido, y en otra gran jugada en la que se fue entre los dos centrales argentinos y disparó un tiro con efecto que engañó a Romero, subiendo el 2-2 al marcador. La respuesta sudamericana no tardó en llegar, sólo tres minutos más tarde y tras la ejecución de tiro de esquina, en el que el balón es tocado de cabeza en una melé, le llega a tocar la rodilla de Rojo que lo mete dentro, dejando el definitivo 3-2 final.
Quedaba toda la segunda parte por delante, pero ambos equipos estaban clasificados, porque a esa hora Bosnia le daba la clasificación a Nigeria al vencer claramente por 3-1 a los argelinos. Por eso, a la hora de juego el técnico argentino Alejandro Sabella no quería sorpresas y sacó del campo a Messi por Álvarez, pensando ya en Octavos de Final. El partido cambió porque los africanos pasaron a controlar el juego, y tuvieron varias opciones de empatar, aunque al final no se movió el marcador.
Bosnia le quitó las posibilidades a Argelia (3-1)
En el otro partido del grupo F, Argelia era quien tenía todavía opciones de clasificar si conseguía vencer a Bosnia-Herzegovina, y si Nigeria perdía ante Argentina. Lo segundo se dio, pero los dirigidos por el técnico portugués Carlos Queiroz, que habían hecho un gran torneo hasta el momento, no fueron capaces de hacer su trabajo, y cayeron derrotados por 1-3 ante Bosnia, que sólo se jugaban el estrenarse con victoria en su debut mundialista y despedirse con honor.
La presión por ganar de unos, la ilusión y ganas de los otros, se vio desde el primer instante de partido. Su delantero Edin Dzeko, muy activo, tuvo dos avisos en los primeros diez minutos, con un disparo de media vuelta, y un remate de cabeza, que obligó al arquero Alireza Haghighi. Además, las noticias que venían del otro encuentro, con el empate de Nigeria en ese momento, obligaba a meter dos goles a los argelinos, lo que todavía atascó más su juego de contra, que hizo mucho daño a Argentina, pero que no se mostraba ante los bosnios.
A los 23’ minutos, en la tercera que tuvo Dzeko no falló, tras una jugada personal en la que se fue por dentro y con un fuerte y ajustado disparo de zurda batió al arquero argelino, que no pudo llegar a salvar. Esto fue un mazazo para los africanos, que ya se les ponía un muro encima. Así todo, tuvieron una respuesta inmediata, que pudo cambiar la suerte del partido, si el fuerte disparo de Masoud Soleimani al travesaño hubiera entrado. Pero no fue así, no era su noche.
A la hora de juego, un robo de Miralem Pjanic en media cancha envió un pase a Tino Susic que definió con tranquilidad para el 2-0 de Bosnia. Ya con todo perdido, y ante unos centroeuropeos relajados, se soltaron algo más los argelinos en ataque, y fue cuando crearon más llegadas sobre la meta de Asmir Begovic. En el 82’, Javad Nekounam rompió un fuera de juego y dejó un pase de la muerte para que Reza rematara a placer y recortara a 2-1. Periodista español especializado en deportes por más de 30 años. Twitter: @cartiles60









