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En lugar de hacer compras navideñas de último minuto, algunas familias de la región sur de Estados Unidos pasaron la víspera de Navidad haciendo el inventario de sus pérdidas después de un raro surgimiento de tornados en diciembre y de otras tormentas que causaron la muerte de al menos 14 personas y dañaron o destruyeron decenas de casas.
"Vaya regalo que nos trajo Santa", dijo Bobby Watkins mientras él y su esposa caminaban entre la destrucción causada en el condado rural de Benton, Mississippi, donde se confirmó la muerte de cuatro personas, incluida una pareja casada y dos vecinos en la misma calle. "Quizá perdí algunas pertenencias, pero sigo vivo".
Un clima inusualmente cálido contribuyó a la formación de tornados en una región comprendida entre Arkansas y Michigan. La línea de tormentas se desplazaba hacia el este con lluvias intensas que causaron inundaciones en Alabama y deslaves en Georgia.
Las autoridades confirmaron siete decesos en Mississippi, incluido el de un niño de 7 años que falleció en Holly Springs cuando la tormenta ganó fuerza y arrastró el automóvil en que él viajaba, indicaron funcionarios.
Seis personas más murieron en Tennessee. Una persona falleció en Arkansas.
Decenas más resultaron heridas, algunas de gravedad, dijo Greg Flynn, portavoz de la Agencia de Manejo de Emergencias de Mississippi.
Cuadrillas de rescate revisaban casas y negocios dañados en busca de personas cuyo paradero aún se desconoce. La búsqueda resulta complicada porque muchas personas salieron por Navidad.
"Hasta que sepan con certeza dónde están esas personas, van a seguir buscándolas, porque hemos tenido casos de viviendas derruidas", dijo Flynn.
