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La jornada 7ª de la Copa del Mundo de Fútbol Brasil 2014 se cerró con una goleada de Croacia a Camerún por 4-0, dentro del Grupo A, que deja los balcánicos con opciones para el último partido ante México, mientras los africanos se convierten en el tercer equipo ya eliminado, junto a España y Australia en el Grupo B. Fue, desde luego, el peor resultado para los intereses del Tri, al que le vale el empate ante los croatas, aunque ya se sabía que se iban a jugar la clasificación en el último partido de la fase de clasificación.
Los llamados “leones indomables” está vez se domesticaron por si sólo al mostrar una gran inocencia a lo largo del encuentro, facilitándoles mucho las cosas a los croatas. Y eso que fueron los africanos los que empezaron mejor asentados en el campo, pero a los 11’ minutos en una rápida contra de Croacia, se comprobó la fragilidad defensiva de Camerún al dejar que Ivan Perisic recibiera un balón desde la derecha y diera una gran asistencia dentro del área para que Ivica Olic rematara a placer el 1-0 en el segundo palo, a pesar de que un defensor le tocó la pierna de apoyo.
La situación del juego no cambió mucho con el gol. Los balcánicos se sentían cómodos jugando a la contra y dejando que los cameruneses tuvieron el balón. El problema para los africanos era que no tenían pegada arriba, limitándose a pelotazos inocentes. Para remate, y aumentar las facilidades a los contrarios, en el 40’ Alex Song comete la tonteria de darle un puñetazo por la espalda a Mario Mandzukic, con el árbitro de testigo. El portugués Pedro Proenca no le queda otro remedio que mostrar la cartulina roja al jugador del Barsa y mandarlo a la ducha.
Ya en la segunda mitad, y con Camerún con inferioridad numérica, vuelven a cometer un grave error defensivo, a los pocos minutos de la reanudación. Perisic, el mejor jugador croata en el partido, aprovechó un “regalo” del portero Charles Itandje y recogió el balón desde la media cancha, al estilo Robben, y llegó hasta el área rival para batir en la salida al arquero, en gran jugada personal, para el 2-0.
A partir de ahí, se acabó el cuento. Sólo era cuestión de ver cuánta sangre era capaz de hacer Croacia. Finalmente fueron dos goles más, ambos del delantero centro Mandzukic. El 3-0 de cabeza en el 61’, y recogiendo un rebote, tras disparo de Eduardo Alves en el 73’, para el 4-0. Pudo ser mayor la goleada, pero les bastó a los croatas porque están pensando en intentar dar la sorpresa si ganan a México el próximo lunes 23, en Recife.
Lo triste fue ver la imagen, al final del choque, de dos jugadores de Camerún, Assou Ekotto y Moukandjo, a los que tuvo que separar Webó, porque el primero le ha recriminado algo al segundo y éste no le ha hecho demasiado caso. Se ha ido por él y le soltó un cabezazo, hasta que llegaron a separarlos. La desesperación de la eliminación que jugó una mala pasada. Periodista español especializado en deportes por más de 30 años. Twitter: @cartiles60