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Tal vez 2013 sea recordado como el año en que los teléfonos multiusos se volvieron aburridos.
Aunque las pantallas de alta definición de los teléfonos multiuso ya son más grandes y sus cámaras son mejores, el ritmo de la innovación alucinante ha disminuido.
Los fabricantes de programas y teléfonos multiuso buscan la forma de salir de este momento de calma en el ambiente tecnológico aunque todavía faltan uno o dos años para que los avances revolucionen el diseño y funciones de los dispositivos de comunicación móvil.
En un presagio de lo que viene, LG Electronics Inc. Presume el G Flex, un teléfono de pantalla curva. Ya en venta en Corea y Singapur, el dispositivo cóncavo llegó a Hong Kong el viernes.
"Queremos asegurar que este es el futuro de los dispositivos multiusos", dijo Ramchan Woo, director de la división de planeación de productos de LG durante una exhibición reciente en San Francisco.
Si esas previsiones se convierten en realidad, los multiusos y las tabletas estarán equipados con pantallas que pueden desenrollarse o doblarse como una cartera.
Hacer que los aparatos sean más fáciles de transportar será importante si es que los creadores de software quieren profundizar el vínculo entre las personas y sus teléfonos. Eso podría suceder si se desarrollan herramientas de localización y tecnología de reconocimiento de voz que permitan que el teléfono entienda los hábitos y pensamientos del propietario como si se tratara de alguien de la familia.
El teléfono del futuro "será suficientemente pequeño para llevarlo contigo todo el tiempo sin siquiera notarlo y será tan importante como para que no quieras deshacerte de él", dijo el analista de Silicon Valley Paul Saffo. "Se convertirá en un motor contextual. Estará al tanto de dónde se encuentra, dónde vas y qué necesitas".
El G Flex sirve para atisbar lo que viene. Pese a su nombre, el G Flex no es plegable sino que es ligeramente curvo de modo que permite acercarse a la boca de la persona cuando se usa en las llamadas. También tiene una batería cóncava, que según LG es la primera en su tipo para los móviles multiusos. La compañía aplicó una capa protectora que "sana automáticamente" para reparar cualquier raspadura leve.
Más que cualquier otra cosa, el G Flex significa el inicio de la evolución del multiusos de la era primitiva de las pantallas planas. En teoría, la tecnología cóncava llevará a hacer pantallas flexibles, que después llevarán a las plegables. Si la evolución ocurre así será posible doblar un multiusos grande para que quepa fácilmente en el bolsillo.
Otra empresa sudcoreana, Samsung Electronics Inc., ya vende un multiusos cóncavo en ese país. Pero a diferencia del arco vertical del G Flex, el Samsung Galaxy Round se curva horizontalmente de izquierda a derecha cuando se le sostiene erguido. Pero su precio de 1.000 dólares lo hace más una cara novedad que un producto de masas.
Al igual que LG, Samsung prepara el escenario para planes más grandes. El vicepresidente de la empresa, Kwon Oh-hyun, dijo a analistas el mes pasado que la compañía cree que puede producir un teléfono multiusos plegable en 2015.