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La infidelidad parece ser actualmente muy distinta de lo que era a mediados de los Noventas. Durante la administración Carter, cuando todavía se emitían Murphy Brown y los Expedientes X, se consideraba que un affair era un encuentro sexual físico real entre personas. Hoy, en cambio, la infidelidad está en el ojo del espectador. A veces, literalmente.
Internet ha abierto un mundo de oportunidades para el caballero deseoso de echar un vistazo a su alrededor. El avance del uso de los medios sociales subió considerablemente la apuesta. Ahora, no sólo se consigue pornografía fácilmente, sino que usted puede hacer que la mujer de sus sueños se conecte a través de una Webcam para algo más cercano y más personal.
Con los encuentros en Facebook, los espacios de chateo y la pornografía prácticamente a voluntad, muchos hombres pueden alejarse de su relación durante una hora aproximadamente desde la comodidad de su living.
Ese comportamiento no ha pasado inadvertido en el radar conyugal. Según una reciente encuesta de HuffPost/YouGov 85 por ciento de las mujeres y 74 por ciento de los hombres consideran que esa actividad online equivale a engañar.
Stephanie Nolasco en “¿El ‘sexting’ cuenta como engaño? Los expertos lo evalúan” comentó refiriéndose a un escándalo político reciente:
“El (candidato político) casado admitió ‘sexting’ con una serie de mujeres, pero negó haber hecho algo físico con ellas. Para algunos, aunque alarmante, dicho comportamiento no equivale a engañar”.
El “algunos” mencionado era probablemente el agente de prensa del político.”
No tuve sexo con esa mujer”, dijo otro funcionario electo en el clímax de las acusaciones por deshonestidad mientras estaba en funciones. Sus palabras fueron elegidas para él por profesionales de la ley muy bien pagos.
Dejando los detalles específicos de los actos sexuales para otra conversación, ¿qué es engañar? ¿El sexting puede considerarse infidelidad? ¿Y andar merodeando para pescar algo; es engañar? Deténgase a escuchar la letra de la canción Piña-colada. El hombre responde a un aviso en el diario y después se encuentra con una mujer en un restaurante. Qué lindo. ¿Engaño?
A Robert Weiss, un trabajador social, le gusta hacer una advertencia al caballero que sale de su relación sin salir físicamente.
“Cuando un hombre hace una promesa de monogamia a una esposa o una pareja y luego rompe esa promesa, está violando un contrato de relación. Yo les hablo además de la idea de que la infidelidad no se define por un acto específico (sexual o de otro tipo), sino más bien por el hecho de tener secretos en una relación íntima”.
En suma –dejando de lado a un puñado de políticos, la gente en general caracteriza el sexting y la pornografía como engaños. Entonces, ¿por qué los hombres comprometidos en una relación engañan?
1) El hombre casado nunca pensó en ser fiel, para empezar. Las palabras dichas en la ceremonia de compromiso eran sólo palabras para él. Deliberadamente o no, engañó a su pareja. Quizá su padre era mujeriego. O simplemente mintió.
2) La “Disonancia cognitiva de los engañadores” impuso su subjetividad. El hombre ha logrado separarse de lo que hace. Se considera a sí mismo bueno, y hace algo malo (engañar) por una buena razón (la que fuere).
3) Este hombre casado es arrogante. Probablemente se siente por encima de otros hombres o que las reglas y las normas son para tipos normales que no son tan completos como él. Si su pareja no está disponible para cada una de sus necesidades o deseos sexuales, se siente justificado para buscar lo que necesita en otra parte. Además, es tan inteligente y listo que no hay forma de que alguien lo pesque engañando. Por lo tanto ¿a quién le importa?
4) El hombre es inseguro o inmaduro. Quizá sienta la necesidad de una atención continua de una pareja para ser “suficiente” o “ser todo lo que puede ser”. La monogamia es secundaria a su necesidad de afirmación constante.
5) Este hombre no puede asumir o simplemente no asumió un compromiso. Hay muchas razones –algunas de ellas muy legítimas. Una historia abusiva puede dejar cicatrices que no se curan fácilmente. Es posible que busque una forma de colmar sus necesidades que él no entiende, como lo hacen algunos hombres con el ABUSO DE SUSTANCIAS. Piense que la híper-sexualidad y un control débil de los impulsos sexuales son síntomas de Trastorno Bipolar.
6) El tipo está harto de la relación y busca un plan B.
7) Es adicto a la adrenalina. Quizás esté buscando una excitación que tenía su relación cuando era nueva y fresca. Quizá no ha tenido ejemplos de una monogamia duradera plena, y no entiende la intimidad que sobreviene con el tiempo y la experiencia.
8) Para este hombre, la monogamia o la lealtad nunca han sido importantes en su gran proyecto.
Seth Meyers Psy.D. en “How to Define Emotional Infidelity: Different Types Cheating” afirma:
“El mejor indicador (de una relación saludable) consiste en analizar el carácter de su pareja y preguntarse cuánto confía usted verdaderamente en su integridad. ¿Cuán leal es su pareja a sus amigos? ¿A su trabajo? ¿A su familia?”
Una pregunta igualmente elocuente que tal vez le convenga hacer es, ¿por qué este hombre piensa que engañar es aceptable? See Davison Cheney's other writings at davisoncheneymegadad.blogspot.com -- and be sure to Ask Prodigal Dad.
